En 1951, un joven estudiante de la Universidad de Princeton escribió su tesis de graduación sobre una industria que despegaba. Su nombre era Jack Bogle y su tesis se centraba en los fondos de inversión. Jack argumentaba que

”La industria no ponía en primer lugar al inversor"

Él creía que, por las altas comisiones, los fondos no podrían hacerlo mejor que el mercado en el largo plazo.


Jack Bogle

A 1.000km de distancia, otro estudiante de la Universidad de Chicago se encontraba trabajando en otra potente idea. Harry Markowitz trataba de demostrar que poniendo juntos diferentes tipos de activos como renta variable, renta fija y bienes raíces ( de diferentes países), un inversor sería capaz de construir una cartera con menor riesgo sin reducir el nivel de rentabilidad.

Años más tarde, Jack Bogle inventó el fondo índice con bajas comisiones y fundó la gestora Vanguard Group, que a día de hoy, es una de las más grandes del mundo, con un patrimonio más alto que el PIB de Alemania. Harry Markowitz se convirtió en el padre de las finanzas modernas y consiguió el Premio Nobel de Economía.


Harry Markowitz

Las ideas de Jack y Harry eran poderosas:

”Pon a los inversores primero, diversifica el riesgo, cóbrale a los clientes bajas comisiones y así, estos lograrán éxito en sus inversiones"

Puede sonar sorprendente que hayan pasado 65 años para que estos conceptos tan simples sean accesibles a todo el mundo en España. La razón es obvia. Estas prácticas no son rentables para la industria bancaria que vive de las altas comisiones y de gestionar grandes cuentas.

Hoy en día, gracias a la tecnología, Finizens puede ofrecer a todo el mundo el beneficio de la sabiduría de Jack Bogle y Harry Markowitz. Sin necesidad de un gran patrimonio, cualquier persona puede comprar, con bajas comisiones, una cartera diversificada a nivel internacional y poseer una parte de los activos financieros mundiales.